Socios Históricos

Homenaje a los socios históricos Koch, Lorber y Claussen

Generación del `50:

En 1928 se creó la Sección Juvenil del DAV Valparaíso, dicho semillero lograría formar para la década de 1950 un grupo de montañistas cuya actividad lograría los mayores éxitos deportivos del club hasta la fecha, situándose entre los mejores deportistas de montaña de la época. Este semillero no sólo logró entregarles conocimientos formativos en todas las disciplinas del montañismo: Senderismo, Roca, Hielo, Ski y montañismo en altura, sino que logró que varios de sus miembros lograsen un amplio dominio de ellas.

Transcurrida la totalidad de la segunda mitad del siglo XX, de ese grupo de jóvenes, destacaron particularmente tres nombres: Kurt Claussen, Heinz Koch y Ullrich Lorber, quienes además de sus destacados logros deportivos, se mantuvieron participando de manera activa dentro del club. Durante dicho periodo de tiempo han servido de ejemplo e inspiración para varias generaciones de socios, pues han hecho del montañismo y del club una forma de vida.

Reconocimiento a la trayectoria:

Heinz Koch:

Destacado deportista y dirigente del club, pionero en la región en escalada en roca. Además de contar con una variada actividad de montañismo clásico, con gran cantidad de primeros ascensos en los Andes centrales, Patagonia y Cordillera Real en Bolivia. Sorprende en la actualidad su actividad realizada en la pared sur-poniente del cerro La Campana, en la mítica ruta de la grieta, la cual llegó a ascender dos veces en el mismo día, en lo que hoy se conoce como solo integral, escalando en solitario sin usar cuerda y además con alpargatas.

 

Heinz fue presidente del club y representante ante ASAVA, la Asociación de Andinismo de Valparaíso, la cual por la época logró mantener en actividad el legendario refugio ASAVA en el valle Monos de Agua, desde donde partieron importantes ascensos a los imponentes cerros que coronan los campos de hielo del sector.

Aguja Nacimiento, 4013m (año 1951).

Santa Elenita, 4230m.

Santa Elena Norte 4460m (año 1951).

Volcán Michinmahuida, 2470m (año 1953).

Punta Consuelo, 5250m (año 1956)

El Ermitaño, 6187m (año 1967).

Cerro las Tórtolas: 6160m (año 1952).

Ascensión junto a Edgard Kausel, donde encuentran pirca de entierro incaica, lo que luego origina posteriores expediciones arqueológicas en las cuales se descubre efectivamente un entierro Inca.

Kurt Claussen:

Resulta difícil resumir la trayectoria de Kurt Claussen, son sumamente escasos los montañistas que han logrado con excelencia conjugar la actividad deportiva, directiva y formativa y además mantener dicha actividad a lo largo de toda una vida. Estos atributos posicionan con seguridad a Kurt Claussen dentro de los mejores montañistas chilenos de todos los tiempos.

Su primer ascenso a La Campana lo realizó a los 10 años, hoy a sus 88 años (2022) sigue realizando rutas en la cordillera de la costa,  entremedio existe una larga lista de actividad.

A nivel deportivo, es el único montañista del club en haber sido elegido deportista del año por la Federación de Andinismo de Chile, fue elegido además en diversas ocasiones dentro de selecciones nacionales y regionales para integrar expediciones que intentaban objetivos de montaña de gran envergadura. Por ejemplo, las expediciones Chileno Japonesas que terminaron con los ascensos a los cerros Kobbe y Arenales, o la expedición organizada por la asociación Valparaíso a los seismiles de la puna de Atacama: Ojos del Salado y Nevado Tres Cruces, estas fueron reseñadas en publicaciones tan prestigiosas a nivel internacional como el American Alpine Journal.

A nivel directivo, ha sido uno de los dirigentes más importantes que ha tenido el club, presidente de la institución en diversos periodos, se ha mantenido de manera activa en el directorio hasta el año 2018. Su participación en la adquisición del refugio de Río Blanco en los 60` y el trabajo permanente de mantención de los refugios, así como guiando actividades del programa dan cuenta de aquello.

A nivel formativo, la labor de Kurt ha sido permanente, su disponibilidad para formar en terreno, de manera totalmente gratuita a varias generaciones de montañistas del club, fue incansable. Aquellos que lograron mantener el ritmo para aprender alta montaña con Kurt, más que aprender una determinada técnica, aprendieron a vivir en las montañas en invierno o verano de forma autónoma, este tipo de conocimiento y experiencia no se puede adquirir con un curso, sino que solo se puede aprender de la práctica prolongada y la experiencia, por lo mismo resulta invaluable, pues inculca valores que no se pueden comprar. Tales como amor por la naturaleza, disciplina deportiva y cariño por la comunidad a la que se pertenece.

Punta Desconocida 4350m (año 1954).

Arenales – Campos de hielo norte 3365m (año 1958).

Punta Amonite – Cerro Kobe 5067m (año 1960).

Centenario 5880m (año 1971).

Don Tiburcio 5830m (año 1971).

El Plomo – Primer ascenso invernal 5424m (año 1957).

Punta Atacama – Nevado Tres Cruces – Cumbre norte 6050m (año 1973).

​Nevado Tres Cruces – Cumbre Central 6350m (año 1973).

Arenales: cumbre con acotadas ascensiones a la fecha, donde no han faltado los intentos. El logro ameritó titular en el Mercurio y que los recibieran en la Moneda.

Plomo invernal: subir el Plomo en invierno hoy es una tarea difícil, con el equipo de 1958 era una tarea casi imposible, «liberan de nieve la puerta del refugio Agostini con una lata de conserva».

Aconcagua: por la ruta chilena.

Ojos del Salado: dos ocasiones.

Nevado Tres Cruces: expedición sube las tres cumbres principales del macizo con dos primeros ascensos luego de haber subido con anterioridad el Ojos del Salado.

Campeón Nacional de ski de fondo.

Elegido deportista del año 1974 por la Federación de Andinismo de Chile

Ulirch Lorber:

Ulrich destacó dentro de la disciplina de la escalada mixta o alpina, disciplina reina en el deporte de montaña, puesto que requiere dominar todas las disciplinas del montañismo: escalada en roca, escalada en hielo y montañismo en altura, fue además un buen esquiador.

 

Ulrich fue un miembro destacado de las actividades deportivas de la década de 1950. Destaca su participación en la legendaria expedición de 1958 en la cual el equipo de alta montaña del club, ascendió de manera consecutiva el cerro Juncal, el cerro Alto de los Leones y el Aconcagua. En este último compartió ascenso junto a Heinz Koch. 

 

Ulrich logró cumbres en dicha expedición en el Alto de los Leones y en el Aconcagua, también logró el segundo ascenso en solitario a la Aguja Nacimiento por una nueva ruta en la cara nor-oriente.

 

A pesar de haber emigrado a Alemania hace más de 50 años, Ulrich se ha mantenido activo a lo largo de toda su vida en el club, particularmente destaca su labor incansable en el proyecto nomenclatura de cerros en el cual recopiló los mapas de la totalidad del macizo de andes centrales, para después ubicar la mayor cantidad de cumbres posibles, sistematizando sus nombres e historia. Luego de terminado dicho trabajo puso la totalidad de la información a disposición de los montañistas del club y del país de manera totalmente gratuita, dicho trabajo significa un aporte gigante para el montañismo nacional que hasta antes del trabajo de Ullrich no conocía con exactitud los nombres y ubicación de las cumbres que habían sido ascendidas en el macizo de andes centrales

Alto del Río Blanco 5228m (año 1958).

Marisco 4500m (año 1959).

Nuevas Rutas:

Nevado Sierra Blanca (Federación) Primera por el Filo SE 5038m

Nevado de Olivares – Primera desde el Glaciar Olivares Gamma 5025m

Alto de los Leones 4to ascenso pared Nor-Este. 5380m

Cerro León Blanco: 5188m



Piolet de Oro a la Trayectoría

 

El piolet de oro, es la máxima distinción contemplada en los clubes de montaña, según los anales de la revista andina, la entrega de un piolet de oro, corresponde a casos excepcionales que hayan logrado rendimientos deportivos extraordinarios sobre los 5000 metros de altura, ya sea a través de nuevas rutas de dificultad o después de largos años de desempeño en el equipo de alta montaña del club (Hochgebirgsgruppe).